En un comunicado conjunto, Cisco y Apple afirmaron que ambas usarán el nombre iPhone en sus productos, y anunciaron que se ha puesto fin a todas las demandas legales relacionadas con el caso. Según el acuerdo alcanzado, las dos empresas trabajarán juntas en las áreas de seguridad y comunicación con consumidores y empresas.
Cisco alegó tras el anuncio del nuevo iPhone de Apple que el uso de la marca constituía una deliberada y maliciosa violación de una marca registrada que la compañía ostentaba desde el año 2000, cuando adquirió la empresa Infogear, que poseía la marca desde marzo de 1996.
Una vez resuelta la disputa los analistas consideran que el acuerdo beneficia a ambas compañías en el reñido mercado de productos multimedia para el hogar.
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